La cirugía estética no ha dejado de avanzar y sigue ayudando a miles de pacientes a tener una imagen más acorde a sus gustos. El rejuvenecimiento genital femenino es una de las intervenciones más solicitadas debido a sus ventajas y a las sensaciones que genera. A continuación explicamos en qué consiste.
Es el nombre técnico de esta cirugía. El parto y el paso del tiempo son dos factores decisivos para alterar la elasticidad y el aspecto de los labios vaginales. El descuelgue de los mismos provoca una asimetría que provoca un inmediato rechazo en la paciente. La hipertrofia de los labios menores también provoca una ruptura estética muy marcada y puede llegar a provocar problemas diversos a la hora de mantener relaciones íntimas.
La cirugía consiste en eliminar estos problemas y en lograr que la zona afectada sea mucho más armónica y no presente irregularidades. Esto se consigue recortando los labios menores y dándoles una forma mucho más natural y rejuvenecedora. Igualmente, se reducen los músculos elevadores de la zona perineal para conseguir recuperar la elasticidad perdida.
Entre los beneficios de esta intervención los más reseñables son los que siguen:
Tras la intervención resulta imprescindible poner en práctica una serie de cuidados que permitan disfrutar de este cambio estético de forma natural. Se recomienda el uso de cremas hidratantes específicas, evitar la depilación del pubis con cuchilla y usar siempre geles específicos con un pH adecuado que evite la alteración de la flora vaginal.
Es muy importante emplear protección a la hora de tener relaciones para evitar contagios de ETS que puedan alterar el estado de salud de cualquier mujer.
Aunque las mujeres a partir de 40 años sean las que más apuestan por esta cirugía, la deformación de los labios menores puede darse a cualquier edad. Una vida sedentaria, diversas dolencias y circunstancias de todo tipo pueden provocar que el aspecto de la vagina no sea el más adecuado. La operación es la forma más práctica, y adecuada, de solucionar esta problemática.
En algunas ocasiones, se piensa que esta cirugía también es efectiva para curar enfermedades que provocan los síntomas arriba descritos. Debemos dejar bien claro que venimos glosando una operación de cirugía estética destinada, exclusivamente, a mejorar la imagen de una parte del cuerpo femenino. El resto de dolencias y consecuencias han de ser tratadas de la forma que estipule el especialista médico correspondiente.
La cirugía estética sigue encontrando, como hemos visto con la labioplastia, las fórmulas más adecuadas para que la mujer tenga la imagen que quiere ofrecer. Todo sea por seguir conservando, o por recuperar, la belleza perdida por el paso del tiempo o por otros factores ya mencionamos. Para terminar, recordamos la importancia de someterse a este tipo de cirugías exclusivamente en las clínicas especializadas que ofrezcan tanto experiencia como garantía de éxito.