La cirugia plastica es una buena solución para mejorar tu aspecto y sentirte más joven. Sin embargo, una combinación de procedimientos quirúrgicos con tratamientos de medicina antiaging puede ser incluso más efectiva.
Este tipo de medicina antiedad es una rama en evolución de la ciencia médica y la medicina aplicada. Interviene sobre las causas del envejecimiento, trata de hacer más lento el deterioro físico y evitar problemas de salud derivados de hacerse mayor. Su objetivo es extender la vida saludable de los humanos y hacer más duraderas todas las características juveniles.
Las soluciones médicas ortodoxas y las pertenecientes a la medicina alternativa se aplican de forma integrada para obtener el máximo beneficio de los pacientes.
Gracias a este tipo de medicina, puedes mejorar la salud y rejuvenecer tu aspecto, a través de una serie de estrategias. Entre ellas est´n:
- Llevar una dieta hormonalmente correcta.
- Enriquecer el cuerpo con dosis óptimas de antioxidantes y nutracéuticos probados (productos farmacéuticos que aportan nutrientes).
- Practicar ejercicio físico, con ejercicios aeróbicos, anaeróbicos y de flexibilidad.
Reajustar el reloj biológico es, en realidad, una combinación de:
- Disminuir el ritmo de envejecimiento.
- Detener la descalcificación, la pérdida de elasticidad en la piel, la pérdida de pelo y otras señales de deterioro físico.
- Invertir los biomarcadores del envejecimiento.
La medicina de este tipo mejora notablemente tu salud general, el estado de ánimo y la claridad y velocidad mental. Inhibe el envejecimiento de las células cerebrales y detiene el sistema de envejecimiento de las lesiones tisulares progresivas y las enfermedades relacionadas con la edad avanzada.
Además, mejora la textura de tu piel, la tensión y la humedad. El cuerpo puede volver a tener un aspecto musculado y contorneado, gracias a la mejora del tono muscular y la reducción de la grasa corporal.
Los resultados pueden ser cambios maravillosos en la bioquímica del organismo, que permiten verse, sentirse y funcionar a nuevos niveles, que solo suelen disfrutar los jóvenes.
Con tecnología médica de vanguardia, la respuesta no está en un elixir de juventud, sino en diagnósticos complejos, que permiten desarrollar un programa específicamente diseñado para cada persona.
Si eres una de las personas que deseen empezar a probar este tipo de tratamientos, pueden empezar por algunos de los más efectivos, entre los que se incluyen:
Gracias a técnicas novedosas, cuyo efecto dura hasta un año y medio, se dota a las manos de renovada suavidad y tersura. Su volumen aumenta de forma inmediata, lo que las hace parecer más jóvenes. Esto se logra mediante la aplicación de un gel y de partículas de hidroxiapatita.
Con la utilización de plasma rico en plaquetas, del que derivan los denominados factores de crecimiento, se consigue la reducción de arrugas, elastosis y discromías.
La técnica usada para ello es la mesoterapia, también con inyecciones subdérmicas, en forma de coágulo plaquetario o mezclado con grasa.
Con los test de oxidación puedes saber el nivel de estrés oxidativo al que está sometido el organismo. Estas pruebas se realizan mediante unos sencillos procedimientos, consistentes en extraer una pequeña muestra de sangre. Los resultados arrojan datos sobre el tipo de dieta, el estado general de salud y las carencias existentes.
De esta forma, se puede establecer un plan de acción para mejorar el estado, tanto interno como externo, del paciente. Se rejuvenecen sus órganos internos y su aspecto exterior.
Una combinación de intervenciones de cirugia plastica y de medicina antiaging resulta perfecta para conseguir reducir al máximo el ritmo de envejecimiento. Con ello, se puede lucir un aspecto mucho más juvenil en pocas semanas.